¿Cómo se elaboran?


REALIZACIÓN DEL PAPEL

Método uno: hacer una pasta con papel

1. Juntar papel usado. La textura y el color del papel viejo que va a ser reutilizado afectará directamente la calidad del acabado del papel reciclado. Se puede usar papel de impresión, papel periódico, servilletas y paños de papel (limpios), papel fotocopia, papel de regalo, papel craft, papel rayado e incluso sobres viejos. Por lo general, con 4 a 5 hojas de papel periódico se obtienen 2 hojas pequeñas de papel reciclado. Esta proporción puede variar dependiendo del tipo y del grosor del papel con el que hagas la pasta.

 

2. Hacer tiras el papel. Romper el papel en tiras pequeñas y casi del mismo tamaño. Entre más finas sean, mejor. Si las tiras son grandes, el producto final quedará grumoso. Se puede pasar las hojas por una trituradora de papel, y luego triturar o romper las tiras en unas incluso más pequeñas.

 

3. Remojar el papel triturado. Poner las tiras finamente trituradas en un plato u olla. Llenar el recipiente con agua caliente. Revolver la mezcla para asegurarse de que todo el papel esté bien remojado. Dejarlo reposar unas cuantas horas, revolviéndolo ocasionalmente. Considera la posibilidad de añadir unas cuantas cucharadas de maicena después de unas horas para que la consistencia sea más firme.

 

4. Licuar la mezcla aguada de papel. Después de unas horas, poner 2 o 3 manojos de la mezcla aguada de papel en la licuadora. Llenar la licuadora con casi la mitad de agua. Encender la licuadora con pulsos rápidos para romper más el papel y formar una pasta. Cuando el papel esté listo para usar, se tendrá la textura blanda de la avena cocida. 

Método dos: colar el papel

 

1. Con una malla. Se usara este dispositivo para colar la pasta mojada, es decir, filtrar el agua de los grumos de papel. Cuando la pasta de papel se seque en la malla, gradualmente se convertirá en papel reciclado. Por eso es importante que las dimensiones de esta malla sean las mismas de la hoja de papel que se quiere obtener. Parte de una malla de ventana es lo ideal.

 

2. Llenar un recipiente con la pasta. Se puede usar una palangana, una bandeja para hornear o un cubo ancho y bajo. Debe ser de por lo menos 10 x 15 cm (4 a 6 pulgadas). Se vierte la pasta en el recipiente hasta que esté medio lleno. Luego, se vierte agua hasta que la mezcla esté a 7 a 10 cm (3 a 4 pulgadas) más abajo. El recipiente debe estar ahora casi lleno, pero no tanto al punto de que la malla haga rebalsar la mezcla de agua y pasta.

 

3. Colocar la malla de ventana en el recipiente. Colocar en el fondo del recipiente para que esté debajo del agua y de la pasta. Con suavidad, mover la malla de atrás hacia delante para que desaparezca todo grumo. Luego, levanta la malla en posición vertical. la pasta estará dispersa de manera uniforme en una capa fina encima de la malla. Opción B: coloca la malla en el fondo del recipiente antes de agregar el agua y la pasta. Luego, verter el agua y la pasta sobre la malla. Cuando se levante la malla del agua, también colar la pulpa del líquido.

 

4. Poner la malla sobre una toalla para que cuele. Se asegura de que la parte con papel de la malla esté hacia arriba y lejos de la toalla. El proceso de colado de por sí no colará toda la humedad. La pasta todavía necesitará como mínimo 1 hora más para colarse bien. Dejarla secando y no tocar.

 

Método tres: prensar el papel

1. Absorber el exceso de agua. Pasada 1 hora, colocar una hoja u otra tela fina sobre la pasta de la malla. Luego, presionar firmemente la hoja con una esponja seca para absorber el exceso de agua de la pasta de papel. La idea es transferir el papel de la malla a la otra hoja. Esta debe ser plana, lisa y estar seca y limpia para que pueda ser un buen molde para el papel.

 

2. Levantar la malla y voltearla. El papel debe traspasarse a la hoja. Ponerla sobre una superficie plana para que se seque toda la noche, o por lo menos unas cuantas horas. Mantenerla en un lugar seco y cálido. Procurar no poner el papel en proceso de secar debajo de calor directo, o muy cerca de una fuerte de calor fuerte. De lo contrario, podría arrugarse y secarse de manera dispareja.

 

3. Pelar la hoja para quitar el papel. Cuando la pasta de papel esté seca, pelarla con cuidado de su “molde”.

 

4. Prueba de calidad. Se escribe sobre el papel nuevo con lápiz y bolígrafo para probar su calidad. Se observa si es lo suficientemente absorbente; si tiene la claridad necesaria para ver las palabras; y si llega a ser una hoja de papel durable y aceptable.

 

REALIZACIÓN DE LA LIBRETA

1. Conseguir materia prima. Lo primero que se debe hacer es conseguir la materia prima que será utilizada para la creación de la libreta, en este caso nuestra materia prima es papel reciclado cuyo proceso fue explicado anteriormente, la cartulina Dúplex para las caratulas y el alambre para el anillado.

 

2. Unión de las hojas de papel. Se colocan la cantidad de hojas que se utilizaran en el proceso de producción de cada una de las libretas.

 

3. Colocación de tapas y contratapas. Los pliegos son apilados en grupos, según el número de hojas especificado para el cuaderno en fabricación controlado por un contador de hojas, se coloca un pliego impreso de tapas y contratapas a los grupos de hojas en pliegos.

 

4. Apilado en pliegos y trazado a tamaño individual. Los cuadernos aun están unidos a un mismo pliego, esta etapa consiste en trozar estos pliegos para formatear los cuadernos a su tamaño individual, este proceso se realiza en forma continua con guillotinas.

 

5. Perforado y espiralado. Cuando las hojas ya se encuentran organizadas y ordenadas se empieza a realizar las respectivas costuras en uno de los lados de las hojas para así poder hacer las diferentes libretas.

 

6. Decorado de las tapas. Como paso adicional se puede añadir listones, escarcha, o un dibujo personalizado a las tapas y contratapas de la libreta dependiendo de los requerimientos del cliente.